sábado, 21 de noviembre de 2009

CUÁL GUERRA HA ANUNCIADO CHAVEZ, ELLOS ESTAN EN GUERRA!

Miles de tropas estadounidenses se aprestan para formalmente tomar Colombia. Desde hace años mediante el infame Plan Colombia, soldados, “contratistas”, oficiales, equipos, helicópteros y aviones han tomado Colombia con la excusa ridícula de “luchar” contra el terrorismo, el narcotráfico y los paramilitares y lo único que ha pasado es que el narcotráfico y el paramilitarismo ha aumentado.

La marihuana colombiana, es la más poderosa del mundo, aparte de la californiana, los envíos de cocaína hacia EEUU han llegado a extremos fantásticos al punto que utilizan submarinos desechables para llevar la droga a sus insaciables consumidores. El control del narcotráfico sin ninguna duda pasa por manos norteamericanas. Es así como los países de mayor producción y exportación de drogas están tomados por tropas gringas como Afganistán (amapola para heroína) y Colombia (cocaína).

La toma de Colombia por EEUU mediante la invasión aprobada por Álvaro Uribe, disfrazada en un convenio para el uso de siete bases militares busca alcanzar dos objetivos fundamentales para el imperio. Controlar la droga, uno de los mas grandes negocios de la actualidad y la mente de su pueblo y dominar la energía, que es el mayor negocio del mundo. Punto. Es lo que desean los Estados Unidos de América.

El informe sobre la necesidad de tener bases en Colombia es muy claro. Repeler los gobiernos antiestadounidenses (como el nuestro) y además, como lo repite frecuentemente Walter Martínez citando a un oficial yankee, para controlar a Venezuela y su reserva energética es necesario tomar militarmente a Colombia.

Desde la implemetación del Plan Colombia y el Plan Balboa, Estados Unidos y Colombia están en guerra con Venezuela. Son gobiernos aliados que pretenden desestabilizar el país, a sus vecinos y gobiernos amigos y pulverizar la revolución bolivariana. El territorio venezolano es utilizado como resguardo y guarida de la guerrilla y paramilitares, y como laboratorio y zona de tránsito de los capos de la droga. El ejercito colombiano desplaza poblaciones enteras que huyen a Venezuela. Las mafias fronterizas contrabandean gasolina que es para nuestro pueblo tachirense y que venden en Colombia. Y ahora resulta que nosotros estamos llamando a guerra.

Pues no, la guerra tiene años implementada allá. La impulsa el desgobierno colombiano, con el apoyo de su tutor Estados Unidos. Nos espían, matan a los Guardias Nacionales, secuestran a los ganaderos y comerciantes, cobran vacunas a humildes trabajadores como kiosqueros, taxistas, empanaderas, buhoneros y profesionales. Ellos matan a su gente en nuestro territorio, como lo hicieron con los que armaron un juego de fútbol y nos acusan de asesinos y de que debemos investigar hasta las ultimas consecuencias cuando ellos saben que es ajuste de cuentas.

Más de cincuenta años de guerra en Colombia se desbordan hacia Venezuela y países vecinos y nos acusan de querer hacer la guerra. Tienen un poderoso ejercito, armado, financiado y entrenado por los gringos. Tienen a los paras, que hicieron una farsa de desarme y que responden directamente a su fundador Álvaro Uribe Vélez y tienen a miles de tropas que se han apoderado del suelo colombiano y nosotros queremos la guerra. Tienen por norma la mentira y la provocación y si nosotros protegemos la soberanía ellos nos acusan de querer la guerra. Los tambores de la guerra retumban en Colombia que ha vivido en ella y conoce el olor de la pólvora y la sangre. Nosotros no. No la queremos, por favor quédense con su droga, con su paramilitarismo, con su guerrilla, con su mafia y con sus gringos. Déjennos vivir en Paz.

sábado, 7 de noviembre de 2009

España y la Inmigración

“Cuando se reactive la economía se va a necesitar mano de obra. Entre otras cosas porque en este país siguen sin nacer niños. Tenemos una de las tasas de natalidad más bajas del mundo. Un niño por cada mil mujeres de 14 a 40 años. Necesitamos mano de obra". Tomás Calvo Buezas, director del Centro de Migraciones y Racismo de la Universidad Complutense, en www.bbcmundo.com sábado 31 de octubre de 2009."

Vale la pena detenerse para leer esta afirmación, claro para no salirnos del contexto es justo decir que aparentemente este profesor defiende la tesis de que la inmigración es buena. Sólo que al final se le escaparon un par de perlas. Veamos. Primera perlita, necesitan nada más y nada menos que mano de obra, para la construcción, la agricultura y todos los demás trabajos que el español no quiere, no puede o no sabe hacer. Sin embargo, la cuestión se resume en que en el país europeo más cercano a nuestro continente, por razones harto conocidas, conquista incruenta, coloniaje explotador durante trescientos años, refugio de inmigrantes y reconolización durante los años duros –para ellos- del siglo XX, cuando fueron recibidos con los brazos abiertos, como hermanos necesitados , requiere obreros. Es decir, explotados.
El asunto es que la política migratoria española se ha convertido en la gran enemiga de quienes viajan a ese país. Los controles migratorios en sus aeropuertos son vejatorios y humillantes. Diariamente cientos de visitantes de este continente son devueltos a sus países de origen luego ser detenidos, sin ninguna clase de derechos, en las peores condiciones posibles y sin acceso siquiera a sus medicinas. ¿Será que tenemos que esperar a que algún venezolano muera para aplicar medidas recíprocas (perfectamente legales)?
Como país con mejores posibilidades económicas que algunos de los nuestros, España se convierte en destino dilecto de miles de latinoamericanos que buscan mejores condiciones de vida y en algunos casos escapar de la violencia que azota a sus países, como Colombia. Pero el gobierno español, ha decidido, perseguir a los inmigrantes, sin contemplaciones. Y al respecto los países latinoamericanos debemos hacer algo más que simples protestas diplomáticas.
La otra perla destacada es la forma despectiva que utiliza para referirse a la baja tasa de natalidad, parece que el catedrático complutense, piensa que las mujeres son paridoras de mano de obra y no de seres humanos. La baja tasa de natalidad española puede ser por muchas causas atribuible solamente a los propios españoles y españolas. En este caso también sería interesante conocer cual es la tasa de natalidad entre los inmigrantes latinos y africanos, la cual debe ser mucho más alta que la de los naturales españoles. Es decir, que aún antes nacer los españoles necesitan la mano de obra de los inmigrantes, necesitan que éstos se reproduzcan para seguir explotándoles. Parecido a lo que sucedía con la mano de obra esclava en nuestro continente. ¡Coño, es que la mentalidad no les ha cambiando!

sábado, 14 de febrero de 2009

LA MADUREZ DEL PUEBLO

Hace unos días tuve el privilegio de ser invitado por el Centro de Estudiantes de la Escuela de Historia de la UCV, a conversar con los estudiantes sobre la enmienda constitucional y el ejercicio de la soberanía. Decidimos hacer un conversatorio con la intervención de los jóvenes que apoyan ambas opciones e íbamos guiando la discusión sobre los temas que se presentaban a medida que iban surgiendo.
Hubo planteamientos de altura, respeto y bastante nivel político e intelectual por los estudiantes de Historia, a pesar de los problemas políticos y allanamientos aceptados por las autoridades de la Central, este grupo de muchachos se merecen mi reconocimiento por su elevado espíritu democrático.
Allí discutimos entre otras cosas sobre la madurez política del Pueblo Venezolano y aunque no hubo consenso sobre dicho nivel, se creemos que el mismo se ha elevado considerablemente en los últimos años.
La Constitución Bolivariana consagra la democracia participativa y nos señala que la soberanía reside en el Pueblo quien la ejerce mediante el sufragio y por los medios que la misma Constitución establece. Esta consagración ha llevado a que la gente participe mucho más en las decisiones que tienen que ver con su vida diaria y la vida del país.
Nuestra Constitución ha permitido que en estos diez años de revolución haya habido más ejercicio de la soberanía que en todos los del puntofijismo, no solamente con la aplicación de la consulta popular para la formación de leyes o con la participación y discusión diaria de temas de diverso calibre, sino también con la activación del referendo revocatorio del 2004, que fue un ejercicio de la participación popular activado por el oposicionismo. Un derecho que le otorga la Constitución Bolivariana.
Ahora de nuevo activamos el derecho soberano que tenemos los venezolanos de decidir sobre un asunto de transcendencia para el país. Toca consultar al pueblo. Algo que no se hacía en la “democracia” de la guanabana. Tenemos que tener suficiente conciencia para valorar esto. La revolución ha permitido el crecimiento de la conciencia política venezolana. Este nivel de conciencia está amenazada por la derecha opositora, la cual aspira llegar al gobierno, desde donde activará todos los recursos para privatizar el poder y para secuestrar las decisiones del pueblo y dársela a las cúpulas, como lo han hecho siempre.
Por esto, con disciplina y organización, el pueblo venezolano va a derrotar a la oposición y al fascismo el próximo 15. La madurez del pueblo venezolano no está en discusión.
guevarafernando99@gmail.com
http://fernandoguevarah.blogspot.com/

sábado, 31 de enero de 2009

La irracionalidad opositora

Fernando Guevara Herrera

Durante los diez años de revolución que comanda Hugo Chávez el oposicionismo ha intentado toda clase de trampas y mentiras para intentar asaltar el poder. Han argumentado todo, cualquier necedad o imbecilidad que les pase por la cabeza la dicen, sin medir las consecuencias. Además, todo se les revierte, como esas maldiciones que cuando las lanzan se devuelve con más fuerza. Misterios de la ciencia, como diría el Dr. Lupa.

Ahora hemos visto unas cuantas cosas que nos revelan bastante sobre la irracionalidad opositora. En primer lugar el eslogan. Ellos dicen simplemente "no es no", como si esa consigna trajera una carga filosófica sensata para oponerse a la enmienda. Diciendo eso pretenden llegar al corazón de millones de venezolanos que armados de ideas y de razones contundentes queremos tener el derecho de reelegir a quienes hayamos seleccionado para un cargo, sin más limitaciones que la voluntad popular, tanto como tenemos derecho a revocar el mandato de quien lo haga mal. Esa consigna es el elemento facilista que siempre ha usado la oposición para agredir al Pueblo de Venezuela.

Por otra parte, ahora los mentirosos escuálidos utilizan los símbolos de la revolución, como el rojo y otros que hemos utilizado, para mentir de nuevo e intentar confundir a la gente con que son partidarios de la revolución. Nótese como en sus paupérrimas marchas los pitiyanquitos usan, para confundir, franelas rojas, pañuelos rojos y propaganda que los revolucionarios hemos utilizado. Escasez de ideas. Consignas vacías. Esas son las armas de la contrarrevolución, además de la violencia y el fuego destructor. Son igualmente unos cobardes que dejaron solo al viejo que les manejaba el camión con un arsenal de bombas molotov. Por cierto que cómodos son, van a las marchas con un vehículo cargado de piedras y cargados de gaveras molotov. No tienen ni la capacidad para encontrar piedras en la calle o para hacer las molotov corriendo bajo las bombas lacrimógenas de la policía y bajo las lluvias de balas de verdad que disparaban cada vez que había una protesta estudiantil hace años. Rebeldes de pacotilla que son.

Para rematar, les han prohibido a los "líderes" estudiantiles declarar ante los medios de comunicación públicos o comunitarios en vista su escasa preparación ideológica, intelectual y política, que solo sirven para repetir las mentiras montadas por guionistas de agencias de publicidad, que son parte del laboratorio mediático que forjaron en Puerto Rico. Escasez de ideas de la contrarrevolución, incapaz de enfrentarse a un pueblo culto y digno como el pueblo socialista venezolano. Sin ideas solo les queda la mentira y la irracionalidad, y seres irracionales con capaces de todo.

guevarafernando99@gmail.com


La Democracia de las mayorías contra la violencia de las minorías


Fernando Guevara Herrera

El principio democrático señala que la voluntad de las mayorías expresada mediante la participación popular ha de ser respetada por las minorías. Un ejemplo de la fortaleza de la democracia venezolana y del proceso revolucionario es el respeto que se le ha otorgado a diversas expresiones democráticas adversas a la revolución. Primero, cuando después de engañar al pueblo venezolano presentando millones de firmas forjadas, la oposición logró, bajo supervisión del CNE, recoger firmas suficientes para activar un referendo revocatorio. Recordamos al Presidente Chávez, en cadena nacional, admitiendo que la oposición recogió las firmas y llamando a la Batalla de Santa Inés, que ganamos y la oposición no ha reconocido hasta hoy su contundente derrota afirmando tramposamente, que hubo fraude.

Luego, en diciembre de 2007, por una minúscula diferencia, los votos no fueron favorables al proceso bolivariano y la reforma constitucional propuesta por el Presidente de la República no fue aprobada y en segundos, el Presidente de la República, admitió la voluntad de esa escasa mayoría (como debe hacer un demócrata). En 2008, luego de las elecciones regionales, los candidatos del proceso revolucionario, Aristóbulo Istúriz, Diosdado Cabello, Mario Silva y Jesse Chacón, entre otros reconocieron inmediatamente el triunfo de sus adversarios, ratificando la fortaleza del revolucionario y del sistema electoral venezolano.

Este sistema electoral liquidó la eterna premisa cuarta republicana de que acta mata voto. Nunca en la historia de los procesos electorales, un sistema ha sido tan auditado como el nuestro y ha salido airoso de todos los análisis efectuados. Y aún así la oposición nunca ha reconocido sus derrotas. Al extremo de que cada vez que pierden una elección gritan fraude, anuncian que presentarán las pruebas, montan guarimbas y violencia mediática, y al final la contundencia de sus alaridos terminan por desaparecer sepultados en un mar de mentiras.

En una democracia normal, las minorías se acogen a la decisión de las mayorías y luchan por el favor del pueblo en las elecciones. Presentan propuestas, enfrentan los malos gobiernos, hacen oposición a las políticas que no creen correctas, pero en nuestro país la oposición, en virtud de los innegables éxitos de la revolución, se refugia en dos canales de televisión, tres periódicos y varias emisoras de radio, para hacer su oposición, basada en mentiras y en desconocimiento de la voluntad de las mayorías. Esta actitud es la que los lleva a oponerse a la posibilidad de que la Constitución sea enmendada, ya que la voluntad popular de la mayoría, se va a inclinar a aprobar la enmienda y a permitir la postulación continua del Presidente de la República y por ende a reelegir, contundentemente en 2012 a Hugo Chávez como Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, para un nuevo período constitucional hasta el 2019 y quizás hasta más allá.

guevarafernando99@gmail.com

La participación popular, la soberanía y la enmienda


Fernando Guevara Herrera


El desarrollo de las sociedades se palpa, entre otras cosas, por la participación de su pueblo en las decisiones trascendentales que corresponda tomarse. Esas decisiones se toman, generalmente, mediante el sufragio. El colectivo es convocado a manifestarse sobre un tema y a través de elecciones se declara la voluntad de la sociedad. Hace un par de décadas un político de la cuarta dijo que no éramos suizos, en cuanto a una posible consulta popular sobre un tema muy importante en ese entonces. Esto en referencia a que en Suiza se hacía referendo para todo.

Gracias a la Constitución Bolivariana nuestro país se ha dado el lujo de tener más elecciones que Suiza. El ejercicio de la soberanía en Venezuela es constante, no solo por las innumerables elecciones que aquí se han hecho, sino porque se practica mediante la participación permanente del pueblo, de cada uno de nosotros. Nuestra soberanía también la ejercemos mediante los colectivos, como consejos comunales, mesas de agua, los colectivos culturales y de trabajadores, y hasta de los grupos oposicionistas que sin ningún temor ejercen su derecho a opinar y hasta sabotear las obras revolucionarias.

La soberanía reside en nosotros y la ejercemos de diversas maneras, la iniciativa constitucional es una de ellas, pudimos ejercerla solicitando la enmienda para modificar el artículo 230 de la Constitución permitiendo la postulación sin límite de la figura del Presidente de la República, lo que es un clamor popular, que no significa la perpetuación en la Presidencia de quien ejerce el cargo, sino la posibilidad de que el Presidente pueda postularse y que el pueblo, en ejercicio de la soberanía, decida reelegirlo o no. Ese es nuestro derecho.

guevarafernando99@gmail.com